Sativas versus Índicas

¿Cuánto sabes de cannabis? Espero que en este espacio hayas aprendido mucho, pero siempre hay cosas a las que es bueno dar una vuelta.

 

Por ejemplo, ¿conoces la diferencia entre los términos “índica” y “sativa”? Pues bien, dame un momento para contarte, de dónde vienen y para qué se utilizan.

Conociendo las semillas

Índica y Sativa son dos subespecies de la planta de cannabis, cada una con características particulares que se deben tener en cuenta al elegir las semillas de marihuana que vas a cultivar.

 

Conocer sus diferencias resulta útil para tomar las decisiones correctas que nos permitan asegurar una buena producción, ya que la cantidad de luz, temperatura, e incluso el lugar para plantarlas puede variar entre unas y otras.

 

Otro punto importante tiene que ver con el efecto y las sensaciones que nos pueden aportar cada una al momento de consumirla. 

¿De dónde proviene cada una?

La cannabis sativa proviene de latitudes cálidas, cercanas a la zona ecuatorial. Se crían bajo una luz estable y con muchas más horas de exposición al sol, en países como México, Colombia o Jamaica, o en Tailandia y Camboya.

 

Por otro lado, la cannabis índica, proviene de climas fríos, siendo originaria de la zona Hindu Kush, estando presente desde a Afganistán hasta China.

 

Como pueden ver, la planta de cannabis ha logrado adaptarse sin problemas a distintos climas, dando origen a las distintas variedades.  

Conociendo las Sativas

Las sativas son plantas de hojas delgadas y de tonos claros que alcanzan una gran altura. Ofrecen cogollos más grandes y menos densos, su olor es más suave y pesan mucho menos después del secado.

 

Estas plantas tienen un tiempo de crecimiento corto y un período de floración más largo. Al provenir originalmente de de regiones cálidas, requieren de temperaturas altas y húmedas para un óptimo crecimiento, y cubierto ese aspecto, pueden ganar altura incluso al doble durante la floración. Una sativa sana y bien cuidada podría alcanzar alturas de 3 a 5 metros, es solo cosa de tener paciencia.

 

Debido a que necesitan mayor espacio para su crecimiento vertical, lo más recomendable es realizar el cultivo de plantas sativas en un espacio exterior. En interior puede que requieran de conocimientos para controlar la altura, además de requerir de una buena ventilación y humedad. 

Algo sobre las Índicas

Las índicas, por su parte, poseen hojas más anchas, florecen más rápido, generan cogollos más densos que se agrupan en racimos alrededor de los nudos del tallo. Son plantas que se adaptan muy bien a los cambios de temperatura debido a que son originarias de lugares donde el clima es menos estable.

 

A diferencia de las sativas, su altura durante el período de floración es menor, pero se puede obtener un alto nivel de producción de flores. 

 

Las índicas son ideales para el cultivo indoor. Su tamaño más compacto, de 1 a 2 metros, y su rápido ciclo de floración las convierte en una buena elección para quienes disponen de poco tiempo y requieren una mayor producción.

Repasando los efectos de cada una

Un alto contenido de THC hace que la variedad de las sativas nos aporte ese golpe rudo y energético que nos deja paraditos por un buen rato. Esta energía inspiradora es bien aprovechada por algunos ya que te baja por hacer cosas, generalmente las que más nos atraen, como si nos cargaran la batería con un power extra. 

 

El efecto de las sativas aporta la alegría de la fiesta y la hace  ideal para reunión con amigos. Es una excelente opción para la vida social. Pasas por el growshop y te compras unos papelillos o la pones en un bong y el resto es diversión compartida.

 

El efecto estimulante de las sativas las convierte en una buena opción para hacer frente a la fatiga y la depresión, entrega un dosis de motivación que algunos utilizan para volverse más productivos.

 

Por otro lado, las índicas nos llevan por un camino distinto debido a que contienen menos THC y más CBD, produciendo un estado de relajación y alteración de los sentidos. Su efecto es ideal para quedarse en casa disfrutando de la tranquilidad de hacer una actividad que no requiera mayor concentración. 

 

Para uso medicinal, son las preferidas para tratar cuadros de insomnio y ansiedad. Para disfrutarla puedes acomodarte en casa con buena música y un vaporizador.  

Lo mejor para cada ocasión

Por eso es importante saber qué estamos escogiendo cuando vamos a comprar las semillas de marihuana para cultivar, ya sean semillas feminizadas o semillas automáticas, debes tener claro el origen, la genética, las composiciones, ya que sus particularidades serán factores que finalmente van a incidir en el resultado que esperas.

Como siempre, me despido feliz de aportarles un poco de conocimiento, especialmente para los que están comenzando y están llenos de dudas. No dejes de compartir también tus experiencias.

  

¡Feliz semana para todos!

 

  

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