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Una movida que tiene detractores y defensores. Y es que el riesgo es que uno puede pasarse de revoluciones y aplicar mucha defoliación, frenando así el crecimiento de la planta. O mejor dicho, estresarla. Y peor aún, eliminar nudos que podrían haber dado grandes cogollos. Por lo mismo hay cultivadores que no están por la defoliación. Piensan que, después de todo, para qué va a necesitar la planta reducir sus posibilidades de crecer sacándole hojas. Aquí te contamos sobre la defoliación, por qué hacerla, cuándo y cómo.
¿Pero es buena o mala idea?
Cabe preguntarse, ¿por qué una planta va a malgastar energía en hojas que no necesita? Tiene sentido preguntárselo, pero creo que no aplica cuando de cultivos indoors se trata. En el exterior las plantas tienen que lidiar con la escasez de agua, plagas y la falta de nutrientes. Por lo tanto sus hojas no sobran cuando el propósito es almacenar nutrientes y energía. En definitiva, cuando la planta necesita protegerse.
Pero en interior el exceso de follaje no tiene mucho propósito. Los niveles de temperatura y humedad, la luz y el acceso a agua están fríamente calculados. Tampoco la planta está expuesta a plagas, por lo que pueden seguir adelante con un poco menos de hojas. Hojas que cuando son muchas y en un ambiente de menos luz pueden impedir la igual distribución de nutrientes. Y además, la libre circulación de aire.
Solo indoor
Pero las condiciones que tiene para crecer indoor no son comparables con lo que obtendría outdoor. El sustrato en el que crece, los nutrientes que contiene ese sustrato, la luz a la que tiene acceso son diferentes en cada caso. Afuera hay más suelo disponible, más luz natural y más nutrientes. Es por esto que la cannabis indoor tiene una limitada reserva de energía disponible para impulsar su crecimiento. Por lo que remover esas hojas que entorpecen el crecimiento de ricos cogollos es una buena idea. De esta manera la planta hará un mejor uso de la energía que tiene disponible.
Otro de los beneficios que tiene la defoliación, como mencionamos antes, es la circulación de aire. Alrededor de la planta y en la habitación misma. Eso redundará en que mantendrás mejor controladas la humedad y la temperatura. La consecuencia de esto es que alejas a las plagas y el moho, que se generan cuando el aire es tibio y la humedad es alta.
¿Cuáles y cómo defoliar?
Aquí no estamos por defoliar a tontas y a locas. Para empezar, la planta tiene que estar robusta, sana, con un tallo derecho, hojas verdes, etc. Si además ha crecido rápido a lo largo del tiempo, mejor aún. Puedes defoliarla. Por el contrario, si defolias plantas que muestran signos de decaimiento o falta de nutrientes, vas a estresar la planta. Y de eso a veces no hay recuperación posible.
Obviamente estamos hablando siempre aquí de plantas automáticas indoor. Las plantas de exterior reciben una luz constante que va penetrando en todas las hojas. Como la luz solar cambia durante el día, incluso las plantas con más follaje reciben gran cantidad de luz.
Para defoliar obviamente lo recomendable es saber cuándo. El ideal son dos veces durante todo el proceso: en la etapa vegetativa y en la floración. Si aún no tienes mucha experiencia, lo recomendable es que defolies solo una vez durante la vegetación. Si ya tienes experiencia, puedes hacerlo más de una vez dado que los tiempos de cultivo le dan a tus plantas la posibilidad de recuperarse.
En la etapa vegetativa
Hazlo justo antes de que pasen a floración. Parte por remover las hojas en abanico, las más grandes. Por su tamaño, obviamente son las que bloquean la llegada de luz y aire a todo lo que esté debajo de ellas. Como la idea es desarrollar buenos cogollos, fíjate en las hojas que crecen hacia dentro. Estas suelen ser un obstáculo para los nudos donde se generarán estos cogollos. Y finalmente, elimina toda flor amarilla. Lo importante es que no te pases. O sea, no remuevas más del 15% del follaje. Y si no te sientes seguro de una, mejor no la cortes. Déjala.
En la etapa de floración
Si te sientes con confianza, y lo suficientemente experimentado, una segunda poda te dará aún mejores resultados. Justo cuando se cumplan tres semanas de floración, haz lo mismo que hiciste en la etapa de vegetación pero siempre cuidando no cortar demasiadas hojas. Concéntrate, si no estás seguro, solo en las hojas grandes. Solo ten cuidado de los cogollos bebés que deberían estar apareciendo. Ahora solo te queda darles agua y nutrientes y esperar que cumplan con su desarrollo.
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